¿Esa sustancia negra y polvorienta que a veces ves en tus llantas? El polvo de frenos está compuesto de metales microscópicos, carbono y otros materiales que se desgastan cuando aplicas los frenos. Cada vez que pisas los frenos, este polvo termina en tus llantas. Si no te gusta ver este polvo sucio en tus llantas, puedes usar la cubierta contra el polvo de frenos. La cubierta contra el polvo de frenos es una solución fácil para ayudar a mantener tus llantas limpias y brillantes.
Así que primero — quieres medir qué tan grande es tu rueda. Por cierto, solo tienes que preocuparte por el tamaño si no quieres que se caiga la cubierta de suciedad del freno. Puedes medir el diámetro de la rueda usando una cinta métrica. Paso dos: quita la rueda del coche. Esto también es una buena idea porque te permitirá acceder más fácilmente al disco de freno. El disco de freno es lo que los frenos aprietan para detener el coche. Luego, puedes deslizar la cubierta de polvo sobre el disco de freno y sobre el eje de la rueda. Este es el lugar donde la rueda se conecta al automóvil. Finalmente, asegúrate de que la cubierta de polvo esté puesta correctamente y que esté ajustada. Cuando hayas verificado que está seguro, vuelve a colocar la rueda en el vehículo. ¡Es realmente así de simple!
Más allá del aspecto sucio y desagradable, el polvo de frenos es un problema de salud en sí mismo. Las partículas inhalables son componentes del polvo y pueden causar problemas pulmonares o respiratorios. Además de ser perjudicial para la salud, el polvo de frenos puede causar gradualmente agujeros y corrosión en tus llantas. Hace que la superficie de tus llantas tenga parches rugosos y débiles. Sin embargo, al instalar una cubierta contra el polvo de frenos —descubre cómo hacerlo a tu conveniencia o con la ayuda de un experto— previenes que el polvo de frenos llegue a tus llantas y, por si fuera poco, proteges tu salud. ¡Y también puede hacer que tus llantas duren más!
Una cubierta antipolvo atrapa el polvo de frenos que se genera mientras los usas. Funciona reteniendo el polvo en un área confinada para que no llegue a tus llantas ni al aire que te rodea. Por lo tanto, no tendrás ningún miedo de inhalar polvo de frenos ni de dañar tus llantas con una cubierta antipolvo. A cambio, esto significa que obtendrás llantas más limpias, saludables y duraderas a largo plazo!
Un protector contra el polvo de frenos evitará que el polvo de frenos se acumule en tus llantas, lo que significa que no tendrás que pasar horas fregando y lavándolas. Más bien, puedes simplemente limpiar tus llantas con un paño y verás que están como nuevas. ¡Pero te ahorra tiempo y esfuerzo! Además, un protector contra el polvo de frenos protege tus llantas de otros tipos de residuos, como la suciedad y la mugre, o incluso la sal de las carreteras, que pueden desgastar la superficie de tus llantas después de meses o años.
Sin duda, hay muchas buenas razones para usar un protector contra el polvo de frenos en tus llantas. La principal ventaja es tener llantas más limpias con menos polvo de frenos producido. Eso significa que nunca tendrás que pasar horas limpiando tus llantas después de cada conducción. Además, un protector contra el polvo de frenos también protege las llantas de otros tipos de residuos y ayuda a mejorar, no solo el rendimiento de la conducción, sino también la estética visual del vehículo.
Los neumáticos pueden ser un gran gasto en tu vehículo y, por lo tanto, es crucial mantenerlos adecuadamente para obtener el máximo uso de los neumáticos. Para proteger tus neumáticos y alargar la vida útil de los mismos, recomendamos que instales una cubierta contra el polvo de frenos. Una cubierta contra el polvo de frenos reduce la acumulación de polvo y residuos en tus neumáticos, lo cual con el tiempo puede causar daños y desgaste.